Deia 21/07/2012: "Jarras que sacian la sed"
DEPÓSITOS de inodoros con el flotante roto, grifos que día y noche pierden agua y bañeras que día tras día se llenan para cinco minutos de relajación. En muchas ocasiones, el agua del grifo se derrocha de forma inconsciente mientras que en otros lugares del mundo millones de niños y mayores mueren desnutridos a falta de agua. Conscientes de ello, el Ayuntamiento de Bilbao, junto con el Consorcio de Aguas Bilbao-Bizkaia, Slowfood Bilbao-Bizkaia y la diseñadora Patricia Urquiola, han lanzado un nuevo proyecto solidario H2O con la intención de dignificar el agua del grifo de Bilbao y apoyar la construcción de pozos de agua potable en Etiopía. Varios restaurantes de la capital vizcaina servirán agua del grifo a un euro para recaudar fondos destinados a esta causa. «Este es un mensaje de ayuda a través de Intermón Oxfam para poder ayudar a todos los habitantes de allí», comentó ayer en la presentación de este proyecto el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna.
«Muchos niños de Etiopía no pueden ni ir al colegio porque tienen que ir a buscar agua al pozo durante muchas horas del día», destacó Patricia Urquiola, la diseñadora encargada de realizar la jarra en la que se venderá el agua del grifo de Bilbao. «Es por eso que creo que con esta iniciativa tenemos que conectar con todos ellos», añadió.
Los cocineros pertenecientes a la Asociación Slow Food Bilbao- Bizkaia también han querido sumarse a la iniciativa y, a partir de otoño, van a ofrecer en sus restaurantes la posibilidad de beber agua del grifo, en vez de la embotellada, en las jarras de Urquiola. La totalidad de la recaudación se donará a Intermón Oxfam para financiar la construcción de pozos de agua potable en Etiopía.
Vender este agua, además, no es mala opción puesto que siempre ha sido calificada de máxima calidad. Muchos incluso aseguran que es mejor que las embotelladas, ya que tiene más controles.
El diseño Patricia Urquiola desde un principio se mostró muy feliz ante esta nueva iniciativa. Poco tardó en contestar al correo electrónico que le llegó a modo de petición. Contestó que sí, que estaba dispuesta a donar el diseño de unas jarras que salvarían la vida de muchos niños y mayores de Toke Kutaye. Después, se puso manos a la obra pero poco tuvo que pensar para que el diseño de estos recipientes naciese. «Cuando me puse a pensar en la propuesta y me repetí varias veces las palabras Bilbao y jarras, pronto me vino a la cabeza las de toda la vida, las de kaiku», explicó ayer Patricia Urquiola. «Me intrigan mucho los objetos que representan nuestra cultura», matizó. Es por eso que el cántaro que se verá a partir de otoño ya está diseñado. «Evidentemente no tendrá las mismas cualidades que las de antaño ya que al no ser de madera no podrá calentar pero el mensaje quedará en las memorias de todos los bilbainos siendo una jarra que nos representa», aclaró la diseñadora.
El alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, también se mostró satisfecho con este diseño. «Serviremos el agua de Bilbao, del Consorcio, con este instrumento nuevo y tan ancestral que los mayores hemos conocido y que usábamos para muchas cosas», comentó.